sábado, 21 de mayo de 2011

Con mi corazón en Yambo




You got a fast car
I want a ticket to anywhere

Maybe we make a deal

Maybe together we can get somewhere


Cuando hago memoria y me traslado a los años 80tas, una de las primeras imágenes que vienen a mi mente es la del video de Tracy Chapman Fast car. La iluminación, el primer plano, el peinado y la canción como tal me encantaban, bueno todavía me encanta.

Para ese entonces bordeaba los 5 o 6 años. Recuerdo muchas otras cosas de esos tiempos jugar con mis primos, el entrar a la escuela, ver Daniel Boone con mi abuelita, el cambio de casa, en fin muchas cosas pasaron y entre una de aquellas, existe un recuerdo algo lejano que es el caso de los hermanos Restrepo.
A partir de ahí se escuchaba de vez en cuando noticias relacionadas, en mi mente quedaron grabados algunos nombres: Doris Morán, Hugo España, la laguna de Yambo y también la imagen en estencilizada de los 2 hermanos. Sin embargo, si bien lo lamentaba era una noticia más que pasaba por la televisión.


Con la sala Alfredo Pareja de la CCE completamente llena, Manolo Sarmiento (director del Festival Internacional de Cine Documental EDOC encuentros del otro cine) comentó que estaba muy emocionado de presentar la película que veríamos. Ya que justamente por esa película se había creado el festival 10 años atrás.
Me encantaron las palabras Sarmiento, estoy completamente de acuerdo con él. Todas las iniciativas y actividades artísticas deben ser creadas con el fin de difundir e incentivar a que se creen nuevos espacios y artistas y sobretodo que se permita expresar libremente sus sueños, miedos, amores, etc. Y se ve que el EDOC es un ejemplo a seguir, felicidades por eso.

Abdón Ubidia dice “el cine es otra forma de hacer literatura” por tal motivo los cineastas, deben lograr que su historia sean creíbles y que el espectador logre entender y asimilar lo que quiere mostrar.
En este caso, qué difícil puede ser, documentar una historia personal, que a su vez, no solamente le pertenece al autor, sino a todo un país. Cómo lograr que esa historia no deje de ser propia y se convierta en una crónica periodística?



Mi corazón en Yambo, deja de ser la interminable reseña del horrible crimen que se realizó a los hermanos Restrepo, para convertirse en un documento humano en el cual se refleja la tragedia vivida por parte de la familia, sus lamentos, alegrías y decepciones. Como su persistencia logró que el silencio deje de ser escuchado y que un país que no creía necesario gritar, grite. Así también demostrar que el poder del amor a veces logra vencer al poder. Y como la autoridad tiene vía libre para cagarse de risa en cada uno de nosotros.

La película está narrada de tal manera que uno debe calzarse los zapatos de apellido Restrepo y sufrir la impotencia de no saber dónde y por qué se llevaron a sus familiares. Convencerse que el silencio permitiría más abusos y comprender que su lucha durante todos estos años ha sido similar a escalar una cascada con el dolor de la pérdida en sus espaldas.
Pedro Restrepo comenta que por lo menos la vida de sus hijos sirvió para dejar un precedente, cambiar las leyes y ahora se piense 2 veces el quebrantar los derechos humanos.
Esta es una de las películas que nunca debío ser filmada. Nadie quisiera ser protagonista de la misma, pero lastimosamente le tocó a la familia Restrepo tomar el papel protagónico y asumirlo.

El caso de los hermanos Restrepo está presente en la mayoría de gente. Sin embargo, existen despistados o desinteresados que olvidamos rápido. Esta película servirá para abrir los ojos de muchos de nosotros y será una piedra en el zapato para cuando se quiera olvidar.

Después de 23 años de la desaparición de sus hermanos, María Fernanda Restrepo saca a la luz su película, su historia tan personal, tan suya como nuestra y no se puede decir nada menos que gracias.

Gracias por no dejar que muera la verdad

lunes, 16 de mayo de 2011

Emputiando por un arte

Sabrán perdonar pero hoy estuve odiando, y prefiero materializar mi odio en algo que valga la pena.

Emputiando por un arte.

"El también estaba embarazado,
en el vientre de su cerebro,
tenía una gran masa que se contorsionaba:
la verguenza que había concebido"
Kenzaburo Oé



Si bien es cierto que a partir de la creación del Ministerio de Cultura las cosas han mejorado, existe más difusión y programas para incentivar las artes. El haber gastado un millón de dólares en la feria del libro del Bogotá es un insulto a los artistas ecuatorianos, por qué? Pues si se viviera en un país donde el apoyo a las artes fuera concreto, continuo, independiente y desinteresado la cosa sería otra. Se justificaría en parte sí ya existiera una cultura de conocimiento, divulgación y apreciación de las distintas ramas artísticas y que la gente al menos esté familiarizada con sus exponentes (por lo menos los más representativos) antes que con “los artistas faranduleros de televisión”.

El despilfarrar un millón dólares no sería tan criminal, si ya existiera una base estructurada y comprometida con la cultura, pero lastimosamente no se ve. La gente que está al frente para sacar y difundir las artes, se saca la madre trabajando, tratando de ser escuchados, vistos, oídos, silenciados y cuando es necesario acudir a los entes responsables de que se otorguen esas libertades, son hasta humillados por el simple hecho de solicitar lo que nos pertenece no como ecuatorianos, sino como individuos.

Se gasta esa cantidad de dinero para sacar la cara del país en el exterior y acá se reduce el presupuesto para actividades como el QuitoFest, Maratón del Cuento, Festival del otro Cine EDOC, etc y la feria de Bogotá costó más que la propia de Quito, superándo las de los 2 últimos años.

Es sumamente gracioso leer lo que dice la ministra de cultura Erika Silva:

“Hemos decidido tomar este proyecto, como un proyecto PAIS. Nosotros somos estado, no somos librería”

Muchos piensan que el arte viene abanderado con una consigna política, contestaría, rebelde. Pero lastimosamente no se dan cuenta que cuando una obra es terminada, deja de parte del creador y para a ser parte de la humanidad y en eses caso cada uno la interpretará como le venga en gana. Son tan estúpidos que piensan que tiene colores.

En estos días ingrese a la pagina del senescyt, recordaba que el gobierno abrió las puertas a un sinnúmero de becas con las cuales se espera que el progreso del país se incremente de manera exponencial. Grata fue mi sorpresa cuando buscaba y buscaba nunca encontré nada ojo NADA relacionado a actividades artísticas. Y te pones a pensar en las contradicciones que se dan y para qué se dan. Se invierte un millón de dólares en una feria extranjera para “promover”, los libros, es decir a los escritores ecuatorianos (muchos de ellos tuvieron que ir por sus propios medios o invitados por entes colombianos)y acá, los nuevos escritores les toca crearse entre varios una editorial para poder ser leídos y nadie las para balón.

Al parecer es la idiosincrasia del ecuatoriano. Caso concreto: En mi casa toda la vida tomamos jugos o agua, y en la refri existía una botella de la Coca Cola, la cual para nosotros era al mismo tiempo invisible y un trofeo. Cuando queríamos tomar de ella, siempre nos decían: -NO la coca cola es solo para los invitados- y así nos educamos, siempre pensando que la vida que nos propagandan o que tenemos derecho, no nos pertenece.



En este país el arte vive de las buenas intenciones de los 4 pendejos que hacen un sacrificio por crearlo y los otros 2 pendejos por admirarlo.

Siempre me he preguntado, cuánta gente valiosa hemos de haber perdido por dar las espaldas a la cultura, cuántos grandes pintores, literatos, músicos, habrán tenido que colgar sus pinceles, lápices e instrumentos para adoptar cualquier otra herramienta que le asegure tener un desayuno con Coca Cola.

El arte se muere x que el hombre necesita vivir en este país y para vivir involuntariamente se debe matar al arte. Un primo el otro día subió unas fotos de cuando era niño y participó en una obra de teatro del grupo Ollantay. Alguno de ustedes ha oído hablar de ese grupo de teatro? Ya es algún tiempo, pero comentan que era un grupo extraordinario, dónde está ahora? Pues solo sé q un integrante hace rato dejo el teatro y ahora tiene una imprenta para vivir.

Odio pensar que en mi país las artes deben ser sinónimo de elitismo, que pertenecen a un grupo muy pequeño de personas. Siempre que leo o escucho a un organizador de algún festival sea de teatro, danza, cine, fotografía, literatura, etc decir: el año pasado congregamos 20, 30, 40, 50 mil personas me preguntó, y de dóndef? Será verdad? Espero que sí, pero muy pocas veces he visto que para esas presentaciones se deba abrir más de una función para complacer a todos los que se quedan afuera. Si eso fuera verdad, me parece que este post no sería necesario ser escrito.

Para finalizar en estos últimos días surgió la polémica que a partir de ahora en el salón de julio de Guayaquil no se podrán presentar obras con contenido sexuales ya que como dice Melvin Hoyos, director de Cultura y Promoción Cívica del Municipio, “Al Museo Municipal vienen niños, jóvenes y ancianos, y tenemos que velar la integridad de la gente, velar por el beneficio de los más por sobre el bienestar de los menos”. Qué gracioso me suenan esas palabras “velar la integridad de la gente” jaja al parecer este país solo quiere ver lo que le gusta. Si vamos por velar la integridad de la gente, se debería de una vez por todas, bombardear los canales de televisión nacional.

no les parece?



martes, 10 de mayo de 2011

El amante de las flores



Vomitándo tantas palabras me he enamorado de este poema, así de simple.


En las montañas de Valkeri
entre los pavorreales que se pavonean
encontré una flor
tan grande como mi cabeza
y cuando me estiré
para olerla

perdí el lóbulo de la oreja
parte de la nariz
un ojo
y la mitad de la cajetilla
de cigarrillos

regresé
al siguiente día
con la intención de cortar
aquella maldita cosa
pero la encontré
tan hermosa
que en cambio
maté un
pavorreal.
Charles Bukowski


Hoy no se puede decir nada más